“Bardos y Desbordes”:
un
juego de ajedrez en el que todo es posible
María Julia Druille es Licenciada en Letras y editora de la Editorial Tersites. El viernes 30 de agosto será una de las anfitrionas en la presentación del libro "Bardos y Desbordes", una antología poética de grandes escritores contemporáneos. En esta nota, Druille nos cuenta sobre el libro y sus autores, sobre los significados de "Bardos y Desbordes" y también sobre la actualidad de la poesía argentina.
- ¿Cómo surge la idea de "Bardos y Desbordes"?
- “Bardos y Desbordes”
surge como una iniciativa de Editorial Tersites, de la que soy coeditora junto
a Marcelo Svartman, para aunar voces de poetas contemporáneos que por alguna
razón hemos conocido en encuentros poéticos y
festivales y hemos considerado de gran vuelo literario. Se nos ocurrió
que el efecto de lectura de poetas de esta talla sería muy interesante para una
antología.
- ¿Por qué y cómo eligieron este título para el libro?
- Una vez convocados los
autores, realizamos una reunión con la
consigna de venir con un título pensado para después votar por el que más nos
complaciera. En realidad sólo hubo dos títulos y quedó finalmente éste, que
inicialmente era “De bardos y desbordes” y se decidió quitarle la preposición. En
cuanto al porqué del título nos pareció que hay un juego fónico y semántico:
bardos-bordes; y en ese juego aparece el prefijo “des” como en una borradura.
De alguna manera hay en los poemas de estos “bardos”( en su acepción “poetas”) un
trabajo que se instala en muchos casos en los “bordes” o en los márgenes de lo
real. Y también aparecen los “desbordes” por la irrupción de la palabra poética en un estado, podríamos
decir, de exuberancia lingüística.
- ¿Cuál es el hilo conductor de esta obra?
- No sé si la obra tiene
un hilo conductor: de hecho, las poéticas son variadas. Lo que sí creo es que
se va tejiendo al leer una especie de malla donde se van enlazando temas sociales,
intimistas, algunos de gran erotismo, o de dudas frente a la complejidad de lo
real. Pero todos, a mi juicio, extrañan la mirada frente a la propia palabra y
las cosas.
- ¿Por qué se eligió a estos autores para conformar el libro?
- Nos une básicamente un
compromiso poético muy profundo, la amistad y el compartir la palabra en
reuniones literarias. Algunos de nosotros nos conocemos desde hace muchos años por acercamientos a la poesía: en revistas,
grupos literarios o blogs. En mi caso, además de editora, coordino junto a otra
escritora que integra la antología el ciclo de poesía “La serendipia”, que se
realiza mensualmente desde el año 2011. Una constante es que todos estos
escritores, alguna vez, han sido invitados a leer en ese ciclo por lo cual
conozco de cerca el trabajo poético que vienen realizando. Ese fue uno de los
factores fundamentales que me animó a convocarlos.
- ¿Qué es lo que une a estos autores?
- Hoy que han pasado ya
tres meses de la primera presentación del libro creo que lo que nos une es una
especie de hermandad, podríamos decir… Quizá por estar unidas nuestras poéticas
en la antología es que los vínculos se fortalecen. Y también por compartir muchos
momentos de lectura y encuentros para consensuar y tomar decisiones sobre la circulación
del libro.
- En la contratapa del libro se plantea a "Bardos y
Desbordes" como un juego de ajedrez en el que gana "la
construcción de sentido" ¿cuál es ese sentido que se aspira a
construir?
- Esa construcción que
creo que realiza el lector al finalizar el libro es infinita en el sentido de
que no hay límites para ese edificio andamiado por la palabra resignificada. Porque
cada poeta muestra una idea de lo real y de la realidad interna vista en un
corte que disecciona el presente y avizora el futuro provocativamente. Para el
lector hábil, este libro “desborda” lo racional y lo lleva a instalarse él
mismo en este tablero de ajedrez donde todo es posible, como dice la
contratapa.
- ¿Cuál crees que es en la actualidad el espacio que ocupa la poesía en
la literatura argentina?
- A mí me parece que la
poesía en este momento tiene un papel protagónico en nuestro país, aunque esto
pareciera contradecirse con lo que la industria cultural quiere mostrar. La poesía quizá esté haciendo un trabajo
silencioso, pero no por eso menos importante. Los poetas no aparecemos en los
medios pero la marea crece poco a poco, imperceptiblemente. Todos los días hay
reuniones y encuentros, que hasta a veces se superponen. Los fines de semana
las propuestas poéticas son múltiples y diversas. Las publicaciones de poesía,
si bien no son de una tirada muy grande, son muy numerosas. Las editoriales
nuevas publican voces diversas con estéticas variadas, algunas
innovadoras, otras más tradicionales pero siempre son (a mi entender) una
resistencia frente a un mundo que tiende a reducir y homogeneizar la
multiplicidad del espíritu humano.
Julieta Gervasoni para CC Marcó del Pont Contenidos