Una noche en la ópera: una gala para disfrutar de cerca.
Cecilia Layseca es cantante lírica. Pero hace ya un tiempo que decidió pararse del otro lado del escenario para dirigir y coordinar “Una noche en la ópera”, un espectáculo basado en fragmentos de las obras más conocidas del género y pensado para disfrutar bien cerca de los cantantes. Una fiesta para los amantes de la lírica y también para los que recién se inician en este fascinante mundo habitado por artistas como Donizetti, Puccini o Verdi.
- ¿Cuál es el objetivo de “Una noche en la ópera”?
- La idea es que la gente sienta que está en el escenario, participando con los cantantes de este espectáculo. Sentir al artista al lado de uno, en plena faena lírica, es una experiencia que cuando sucede sorprende y emociona.
- ¿Cómo definirías a este espectáculo?
- Este es un espectáculo lírico basado en las obras más conocidas del género operístico. Elegimos aquellas que la gente reconoce y disfruta. La característica propia es que está hilado de tal manera que hay un argumento intrínseco. Son tres personajes (encarnados por la soprano Gabriela Gonzalez, el tenor Sergio Tchabrassian y el barítono Fabio Recchi) a los que les van pasando cosas entre sí. La historia se describe con la acción, con la parte dramática que ellos van actuando; pero también con lo que cada uno de ellos siente al escuchar al otro. Es un intercambio de personajes de muchas óperas que se encuentran en este lugar para contar algo. No solamente para cantar.
- Dadas las características que mencionás, “Una noche en la ópera” debe tener una gran variedad de climas…
- Exactamente. Además, al no existir un argumento único, la idea es generar climas a través del movimiento escénico y de la dramatización gestual. No hay texto. El texto es el original de cada fragmento de las óperas elegidas. Y hay muchas que son conocidas por casi todos. Y a los que vengan y no las conozcan igual les va a gustar: algo van a encontrar que les llame la atención. Y se van a dar cuenta de qué se trata aunque nunca hayan escuchado las obras. Ésa es la idea de este espectáculo: que sin saber el idioma ni conocer el texto o la ópera, los espectadores puedan entretenerse. Así que “Una noche en la ópera” es para todos los gustos: aquel que viene y conoce el repertorio, se va a sentir identificado; y aquel que viene y no sabe nada del género, igual va a entender lo que pasa y lo va a disfrutar.
- Da la sensación de que en este momento hay un resurgimiento del género operístico…casi que se puso de moda…
- Yo creo que las personas están mucho más cerca que antes de la ópera porque se dio un fenómeno de apertura. Hoy por hoy, hay mucha gente joven que se está interesando en el tema. También está relacionado con que los artistas empezaron a encontrar más espacios para expresarse. El público antes creía que sólo se podía ver ópera en el Teatro Colón. Ahora eso cambió: se brindan espectáculos operísticos en Mendoza, en Tucumán, en Córdoba y en muchísimos otros lugares en los que antes no había acceso. Yo creo que es un movimiento social y cultural que florece naturalmente dentro de nuestra comunidad. El género de la ópera en algún momento iba a resurgir. En la década del ’30 y del ’40 muchísimas asociaciones italianas y españolas construyeron infinita cantidad de teatros en nuestro país. Después, en los ’50, esos teatros se usaron para el cine: se achicaban las salas, se acomodaban las butacas, se minimizaban los escenarios, se tapaban las fosas de orquestas. Pero la realidad es que todos somos descendientes de inmigrantes, gente que tenía una cultura operística importante. Entonces, tarde o temprano, ya sea por el abuelo, por la tía o por el papá; las personas se iban a interesar por la ópera. Y yo creo que cuando alguien conoce y asimila lo que es la ópera se enamora perdidamente del género. Le encanta. Después no va a ser necesariamente un consumidor permanente pero sí lo reconoce como algo que puede disfrutar. La música de ópera es universal.
- Vos sos cantante lírica, ¿por qué decidiste dirigir este espectáculo? ¿Cómo es estar abajo del escenario y no arriba?
- Lo que pasa es que yo nunca me bajé del escenario. Porque la ópera no es sólo lo que pasa ahí arriba… Y además es tan rica como género... Son muchísimas las artes que forman parte y le dan vida a una ópera. Lo que me pasó a mí fue que empecé a querer aprender otras cosas; y no quedarme solamente con lo que cantaba y actuaba. Me fascinó adentrarme en un mundo que para mí era desconocido: armar una producción, crear un diseño del proyecto, dedicarme a la difusión... Y en lo que respecta a la parte actoral yo me siento como una más, como si estuviera arriba del escenario. Porque en realidad, cuando uno como cantante recibe la propuesta de un régisseur, está interpretando y recreando la propuesta de ese régisseur. Uno está participando en ese hecho creativo. Ahora, la única diferencia es que yo no canto. Pero igual me siento parte del escenario y disfruto mucho. Todas estas nuevas áreas de las que me ocupo ahora me encantan y son necesarias. Y como si fuera poco, me permiten disfrutar de mi trabajo desde otro lugar.
Julieta Gervasoni para CCMP Contenidos.
Una noche en la ópera | Con la presencia de Gabriela González, soprano;
Sergio Tchabrassian, tenor y Fabio Recchi, barítono.
Sábados de Febrero de 2011 | 20:30 hs.
Centro Cultural Marcó del pont, Artigas 202, Flores, Buenos Aires